Odio tu habla constructiva
Que consume las partículas de arena
Que están en nuestro cronos.
¡Siempre buscando agradar!
Ya te lo dije muchas veces
Y no se como hacerlo una vez mas…
Ahí te queda mi espacio vacío
Para que hagas lo que se te antoje con él,
Te dejo unos sueños falsos
Y algo en lo que pensar o enloquecer.
Te dejo un poema
De estrella fugaz
Garabateado en papel.
Te dejo recuerdos ficticios.
Dejo laberintos,
Dejo espejismos,
Mi alma, lo siento,
No es mía,
No te la podes quedar;
Mi cuerpo conmigo se va.
Por ahí queda, creo, una canción
Te quedan las aves de metal
Y un poco de silencio;
Tu vida y algunos de mis pensamientos
Que sin querer deje en tu cerebro.
Después de todo
También te dejé una carcajada;
Mi vida es mía, esa no te la puedo dar…
No hay comentarios:
Publicar un comentario